Bueno en realidad todas son buenas, lo importante es mover las piernas y estar con gente maja, lo segundo es lo que mas importa y eso lo tenemos garantizado.
Gracias a los conocimientos de estos años de atrás al ir caminando a la Virgen de la Cuesta andando, había muchos lugares que ya sabíamos de su existencia: la cascada, cueva negra, el espartal, la piedra partida por el rayo, el romeral, etc...
Lo dicho una experiencia muy recomendable la de hoy, mucho verde, mucha agua, buena temperatura y lo mejor la compañía, esta vez con el Sebas, que más se puede pedir para pasar la mañana, pues na, bueno un buen almuerzo después de la caminata no vendría nada mal.