jueves, 31 de marzo de 2016

Los disgustos me engordan, jeje

Que vergüenza, y luego dicen de igualdades y derechos, hoy me he llevado un disgusto de los que engordan, ayer vino mi chico el grande y me comento que una de las empresas grandes del lugar, estaba buscando una persona para encargarse del control de calidad de sus productos, bueno yo en mi anterior trabajo, era el responsable de calidad y se me abrió el cielo, por fin, alguien necesita a una persona que desarrolle esa actividad, hace poco  también acudí a entregar el currículo a otra empresa y me dijeron que para que me molestaba, que lo que querían era un ingeniero agrónomo, y pedían un auxiliar administrativo para llevar la calidad, en fin algo denunciable, pero me calle.

Bueno pues esta vez y teniendo allí un contacto en esa empresa, decidí llamar y preguntar por esa persona para que me informara, ¡que vergüenza, que desfachatez!, no lo digo por mi contacto, solo por la decisión de su empresa de solo contratar para ese puesto a una chica, debe ser una persona mujer, nada de persona, persona, solo pueden presentarse mujeres, en fin desolado y asqueado por este machismo tan intolerable, recibí la llamada de mi amigo Jesús, quería que le acompañase a un pueblo cercano a buscar algo que le interesaba a su sobrino madrileño, asi que atacando, y me alegro pues mientras buscábamos y veíamos cosas nuevas se me olvido el disgustazo tan tremendo que me lleve.

Después acudimos al restaurante que dicen prepara la mejor paella del mundo mundial, que estaba en un pueblo mas  adelante, allí me comporte, me pedí la coca-cola zero y casi apenas probé el aperitivo, solo las setas que estaban acompañando unos trocillos de lomo y la salsa llevaba diversos tipos de setas, toda una delicia gastronómica, de veras.

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